El moisés para bebés Happiest Baby SNOO, diseñado por el estudio californiano fuseproject, es infalible a los lloros. Cuando detecta ruido o movimientos inquietos, activa automáticamente un suave balanceo que calma al bebé hasta que se queda dormido. Así, ni padres ni madres tienen que levantarse, y todo el mundo puede descansar. Un ejemplo más sobre cómo la tecnología smart aplicada a las personas puede mejorar nuestras vidas. Mucho.
IoT para vivir mejor
Todos estaremos de acuerdo en que una de las peores partes de la maternidad/paternidad son las interminables noches de lloros nocturnos. El agotamiento y la falta de descanso pueden acabar generando serios problemas en el bienestar de todos. Estrés, fatiga, depresión, frustración o miedo en los padres; y una espiral peligrosa de más lloros, aumento de presión sanguínea o déficit de atención en los bebés. Si el famoso Método Estivill no te funciona o no te convence, aquí está la tecnología smart para ofrecerte una alternativa: la cuna Happiest Baby SNOO.
Durante cinco años, el estudio de diseño fuseproject trabajó codo con codo con el Dr. Harvey Karp, una eminencia de la pediatría en Estados Unidos, creador del método 5 S para calmar a los bebés. A partir de su teoría (swaddle, side, shush, swing y suck, es decir, inmovilizar, recostar, sisear, balancear y chupar), desarrollaron Happiest Baby SNOO, un moisés inteligente que reacciona automáticamente al llanto del bebé y lo «auto-calma».
Diseño y funciones
Una vez definidas las funciones que debía incorporar la cuna, el equipo de fuseproject se centró en la parte de diseño. Los imprescindibles: altura adecuada (sobre todo pensando en al espalda de la madre), interior visible y hecha con un material fácil de limpiar. El diseño debía transmitir, además, confianza. Al tratarse de una cuna tecnológica, era vital que nadie se asustase. Por eso optaron por una estética ultra minimalista, natural, refinada y que manifestara alta calidad. Nada chillón, ni infantiloide. Tecnológica, a la vez que humana. Y el resultado a la vista está: entre celestial y 2001: A Space Odyssey.
Los elementos estructurales curvos sostienen una doble capa de malla que facilita la ventilación y permite observar el bebé desde fuera. También incorpora tres micrófonos para detectar el llanto del bebé y diferenciarlo de otros ruidos externos. Bajo el colchón se encuentran los sensores y los altavoces, así como un motor robótico. Las patas, en forma de horquilla, sostienen de manera segura y pulcra todo el conjunto.
El bebé duerme envuelto en un saco de algodón orgánico (recordemos la primera de las 5 S: swaddle, inmovilizar). Es lo bastante flexible para que pueda moverse, a la vez que abraza al bebé lo suficientemente como para aportarle sensación de confort y seguridad. Este sistema pretende emular el útero materno, mantener una temperatura agradable y transmitir el balanceo que le acompañará hasta un apacible sueño.
Y para los padres que aun quieran más, fuseproject ha diseñado una app donde podrán controlar las horas de sueño del bebé, comportamiento, fases, etc.
La cuna de los famosos
Desde su lanzamiento en 2016, la cuna inteligente SNOO ha causado gran sensación. Tanto es así, que celebrities del calibre de Justin Timberlake, Scarlett Johansson, Serena Williams o Ashton Kutchen la han usado para sus hijos.
Su diseño e innovación tecnológica han sido reconocidos con numerosos premios, como Good Design Award o el Innovation of the Year, y se ha exhibido en el Design Museum, London, V&A Museum o SF MoMA, entre otros.
El precio aproximado de la cuna es de unos $1.300 y en Estados Unidos está disponible en formato alquiler por $5/día.
Imágenes © fuseproject
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