Un brillante suelo ajedrezado, paredes rosas y azules y una tipografía años cincuenta envuelven la deliciosa repostería americana de Petit Pastís, en Barcelona. El interiorismo de Marc Duran y Alba Masides nos sube directos al DeLoeran de Marty McFly con destino a Hill Valley.
Petit Pastís
Al estilo Cafe de Lou de Regreso al Futuro. Así es Petit Pastís, un pequeño obrador situado en un chaflán del Eixample, junto a la Sagrada Familia, especializado en pasteles artesanos caseros. En él, Valerie y Albert, dos reposteros formados en la prestigiosa Escuela de Hostelería Hofmann, preparan deliciosos postres en un local ambientado en los años cincuenta.

Diseñada por Marc Duran
Los artífices de tan ameno interiorismo son Marc Duran y su compañera de estudio Alba Masides. Lo concibieron desde la doble vertiente de sus propietarios. Ella, una venezolana entusiasta de la repostería típicamente americana. Él, un hombre metódico y partidario de la cocina tradicional catalana.


Estilo años 50
El diseño interior de Petit Pastís parte de esta dualidad y se proyecta sobre dos áreas sutilmente diferenciadas. Por un lado, la zona de atención al cliente; por el otro, el obrador. La primera queda delimitada por el juego ajedrezado del suelo, blanco y negro, que contrasta con un azul naïf y la identidad corporativa, totalmente fifties. Todo ello amenizado con muebles expositivos rosas y blancos y lámparas colgantes con esferas de espejo bronce.


Obrador a la vista
Para la zona de trabajo, en cambio, Duran y Masides optaron por enmarcarla en una combinación de tonos rosas para suelo y techo, y cerámica blanca rectangular con borada negra en las paredes, estilo laboratorio. Un hermoso contraste con las neveras y maquinaria de acero inoxidable.


Gracias a la gran ventana acristalada de las puertas de vaivén, los clientes pueden observar cómo trabaja el propietario.

Iluminación teatral
Tampoco olvidaron la siempre esencial iluminación. Durante el día, la zona de trabajo cuenta con luz directa. Por la noche, la pastelería adquiere tonalidades escenográficas mediante un juego de luces y sombras que llama la atención de los transeúntes cuando la pastelería está cerrada.



Petit Pastís está en Carrer de Còrsega, 494, 08025 Barcelona. Están especializados en tartas estilo americanas, layer cakes, cookies, mini milk-cake y pasteles artesanales.
Fotografía © Meritxell Arjalaguer
Un comentario en “Una pastelería fifties a los pies de la Sagrada Familia”